Una montaña sagrada muy cerca de Santiago de Chile, la gente del Club de Andinismo Apu Willka nos invitan a visitarla con admiración y respeto
Muchos montañistas de distintas partes del mundo intentan acceder a esta cumbre con solo 5.424 mts. ubicada en la Región Metropolitana de Santiago de Chile (coordenadas 33°13′58″S 70°12′44″O), algunos por pasión, otros por deporte…. y otros simplemente ír a buscar esa energía vital que este nos entrega en cada ascenso… al igual que la cultura inca realizo hace mas de 500 años y en donde aún se encuentran muchos vestigios, sobre todo una ofrenda a los dioses de la montaña, el primer descubrimiento de un cuerpo en excelente estado de conservación debido a la gran altura, el “niño del Cerro El Plomo" o momia del plomo (se le denomino así, pero la realidad es que no es una momia ya que no tiene proceso de momificación).
Descubierto en el año 1954 por unos arrieros de la zona en la cumbre misma del cerro el plomo, fue desenterrada y traída a Santiago (paso varios días en el sector de piedra numerada (3407 msnm), donde los arrieros dejaron al niño, que en ese momento empezó el proceso de descomposición debido al aumento de la temperatura y al cambio del medio en el que fue encontrada, para ser vendida al museo de historia natural). Hoy en día esta se encuentra en el museo en donde se puede ver la réplica exacta del niño el plomo, y apreciar la serenidad que refleja al ver como este personaje de solo 8 años aproximadamente fue enterrada en este lugar.
Hoy en día tratamos de visitar el lugar por lo menos dos veces al año, intentar esta cumbre de alta montaña, recorrer cerca de 38 kilómetros ida y vuelta (desde el sector de Valle Nevado hasta la cumbre) esta ruta se realiza en un promedio de 2 a 4 días, dependiendo de la condición física de los andinistas… Algunos pueden llevar mulas que les transporten el equipaje, pero nosotros buscamos y recomendamos caminar con sus mochilas, tomarse el tiempo necesario de apreciar cada piedra, cruce de agua, etc. entender como los incas eligieron este cerro mítico como el gran Apu Wamani (Guardián del Valle) de la zona… Nos encontraremos con un salto de agua o Cascada (3608 msnm) maravillosa que se encuentra frente a un tambo, que mucho montañistas creen que es una pirca. Vistas de los Andes Centrales y del valle de Santiago, y el impactante Glaciar Iver.
Vivo la montaña al máximo en esta región de Chile que nos entrego la pachamama como préstamo, no somos dueños y la enseñanza que dejamos en cada salida a la montaña es respetar estos espacios, y sobre todo un cerro que muchos consideramos un santuario de la naturaleza. Pueden visitar estos cerros siempre que lo deseen, y acompañados de personas que les entregaran solo las energías positivas del Apu en compañía del Club de Andinismo Apu Willka.
A finales de enero de 1954, Guillermo Chacón, buscador de minas y tesoros, junto a su amigo Luis Gerardo Ríos y su sobrino Jaime Ríos, iniciaron una excursión desde la localidad de Puente Alto, que tenía como objetivo explorar tres estructuras de piedra en el cerro El Plomo, a 5.400 metros de altura en la cordillera frente a Santiago.
No era la primera vez que Chacón, detrás la huella de una mina de plata, había ascendido dicho cerro y excavado en el lugar, donde había encontrado algunas figuras de plata de confección indígena.
Por su avanzada edad, Chacón no subió hasta las estructuras de piedra y permaneció en un sector llamado "Piedra Numerada", mientras Gerardo Ríos y su sobrino Jaime ascendían hasta el punto más alto para cumplir con su objetivo.
Luego de una dura jornada de excavación y afectado por la altura, Jaime Ríos encontró en la última de las pircas o estructuras dos figuras de camélidos, una de aleación de oro y plata y otra de concha de mullu, junto con otros objetos que componían la ofrenda ritual del Niño.
Prosiguieron con su trabajo hasta que se toparon con un objeto, que si bien no era duro, fue de difícil extracción. Después de tomar un descanso y almorzar, insistieron con pala y chuzo hasta que finalmente Luis Gerardo Ríospudo extraer ese bulto, se lo pasó a su sobrino y siguió explorando la pirca. Minutos después, Jaime le comunicó que el bulto contenía un “niñito”. Era el 1 de febrero de 1954.
çBajaron a "Piedra Numerada" y pasaron la noche junto a Guillermo Chacón. Antes de volver a Puente Alto decidieron enterrar el cuerpo del infante en una cueva y descender sólo con los otros objetos que habían encontrado.
Semanas después, Chacón propuso a Gerardo Ríos buscar alguien que les dijera el valor de lo encontrado. Viajaron entonces a Santiago con el propósito de consultar y vender los objetos. Se dirigieron primero hasta el Museo Histórico Nacional, donde no fueron recibidos y luego hasta la Quinta Normal para visitar el Museo Nacional de Historia Natural.
Vista del enterratorio destruido producto de las excavaciones en busca de tesoros.
En el Museo Nacional de Historia Natural fueron recepcionados por Grete Mostny, jefa de la Sección Antropología entre los años 1943 y 1964, quien examinó lo traído por Chacón y Ríos. Mostny les solicitó que volvieran en unos días debido a la ausencia del director Humberto Fuenzalida. En la segunda visita, Fuenzalida, también examinó los objetos, pero no se pudo llegar a un acuerdo sobre el precio y la venta no se efectuó.
En días posteriores Grete Mostny viajó a Puente Alto con el propósito de adquirir el cuerpo del Niño para el Museo. El 8 de marzo de 1954, Guillermo Chacón y Gerardo Ríos ascendieron a El Plomo, retiraron el cuerpo de la cueva donde lo habían dejado y bajaron a Puente Alto.
Las negociaciones entre Chacón y el director del Museo fueron arduas hasta que finalmente la pieza fue adquirida por la suma de 45 mil pesos de la época. Este hecho alcanzó gran cobertura informativa en los medios nacionales e internacionales, dándolo a conocer erróneamente como la momia del Cerro El Plomo, además de afirmar que se trataba de una princesa.
El hallazgo del niño del Cerro El Plomo fue el primer descubrimiento de esta naturaleza efectuado en la republica de Chile y se caracterizó por la calidad de su conservación así como por la modalidad de su enterratorio.
Fuente: Museo Nacional de Historia Natural de Chile, www.mnhn.cl
Centro cultural Argentino de Montaña 2023