Montañismo

Nuevamente tragedia en el Everest

Al menos doce sherpas muertos por un alud en el Everest

El pico más alto del planeta, el Everest, amaneció ayer con una de las tragedias más graves de su historia cuando por lo menos 12 guías nepaleses, que estaban preparando el camino para el arribo de cientos de expedicionarios internacionales durante la temporada de escalada, murieron por un alud.
Uno de los rescates realizados en el Everest. Foto: www.conexionbrando.com
Otros tres guías quedaron gravemente heridos y cuatro están desaparecidos tras la avalancha de nieve, producida a unos 6200 metros de altura, entre el campamento Base I y el Base II, a las 7 (hora local).
Las víctimas formaban parte de un grupo de unos 30 sherpas que habían salido por la mañana con carpas, alimentos y sogas para preparar la temporada, que comienza a finales de este mes.
"Cuando nuestros guías partieron del campamento base no nevaba, el tiempo era fantástico", dijo a la prensa Bhim Paudel, gerente de operaciones de Himalayan Climbing Guides de Nepal, con sede en Katmandú.
Paudel confirmó que dos de sus guías se encontraban entre los muertos y que cuatro habían desaparecido. Agregó que antes del fatal alud decenas de guías de otras agencias habían cruzado ese paso sin problemas.
"Nuestros sherpas estaban siguiéndolos, no recibimos ninguna alerta", explicó.
Uno de los supervivientes, el sherpa nepalí Dawa Tashi recibe atención médica
en el hospital Grandee de Katmandú, Nepal. Foto: EFE
Fhurbu Sherpa, esposa de Dawa Tashi Sherpa, sobreviviente de la tragedia del Monte Everest. Foto: www.alpinismonline.com
Este accidente deja en evidencia los enormes riesgos que corren los guías sherpas, que llevan carpas, alimentos, reparan las escaleras y colocan las cuerdas para ayudar a los alpinistas extranjeros que pagan decenas de miles de dólares para llegar a la cima.
Para este verano, cuando las condiciones climáticas se tornen favorables, el gobierno de Nepal otorgó licencias a 734 personas -incluidos 400 guías- para ascender al Everest.
Un equipo de socorristas, con respaldo de helicópteros, continuaba ayer la búsqueda de supervivientes. Siete personas que habían sido cubiertas por la nieve y el hielo fueron rescatadas con vida, precisó Paudel.
En tanto, un funcionario del equipo oficial de rescate que trabaja en el campo base de esta cima de 8848 metros de altura, Lakpa Sherpa, dijo que el total de muertos podría llegar a 14.
La tragedia muestra también el problema social de Nepal, un país pobre de la cadena del Himalaya que cuenta con ocho de las 14 cimas más altas del mundo, con más de 8000 metros.
En un país donde el sueldo promedio es de 70 dólares por mes, quienes se dedican a la actividad de guías de montaña pueden ganar hasta 7000 dólares en un mes y medio de trabajo si logran hacer cumbre con los expedicionarios. A eso hay que descontarle la comisión que queda para las agencias en las que trabajan.
Aunque el nombre sherpa se volvió sinónimo de guía de gran altura, en realidad indica un grupo étnico específico de origen tibetano y religión budista, que habita en las montañas orientales de Nepal. No son escaladores ancestrales, pero comenzaron a entrenarse en el oficio desde mediados del siglo pasado cuando el explorador neozelandés Edmund Hillary llegó por primera vez en 1953 a la cima del mundo.
Personal médico del Grandi International hospital de Katmandu en el helipuerto aguardando la llegada de heridos desde el BC del Monte Everest. Foto: www.alpinismonline.com

Otras tragedias

Más de 300 personas murieron allí desde esa primera ascensión. El peor accidente fue en 1995, cuando un enorme alud cayó sobre el campamento de un grupo japonés, cerca del Everest, y mató a 42 personas, entre ellas 13 japoneses. Además, en 2012, una avalancha en la montaña Manaslu, en el Himalaya, mató a 11 expedicionarios, la mayoría europeos.

La de hoy es una de las tragedias más graves registradas en el Everest. Desde que el británico Edmund Hillary escaló por vez primera la cima del Everest el 29 de mayo de 1953 acompañado del sherpa Tenzing Norgay, en estos 61 años de ascensos a la cumbre más alta del mundo, al menos 240 personas han fallecido, según datos de Elizabeth Hawley, la veterana periodista experta en escaladas en Nepal.

Algunos de los cuerpos continúan congelados en la denominada "zona muerta", donde la cantidad de oxígeno en el aire no es suficiente para sostener ninguna forma de vida, y otros siguen desaparecidos.

Las primeras víctimas del Everest fueron siete sherpas que cayeron sepultados en 1924 por un alud en la pared del collado Norte, durante la tercera expedición británica a la montaña, mucho antes de conquistarse la cima en 1953.

Campo base del Everest 2011. Rescate en camilla en la parte final de la Cascada de Hielo, cerca del campo base Everest.
Foto: Darío Rodríguez, www.desnivel.com

Rescate de los cuerpos, tras el alud en el Everest. Foto: Facebook de Claudio Martinez

El accidente más mortífero en toda la historia del Everest sucedió en noviembre de 1995, cuando fallecieron 26 montañeros, 12 alpinistas japoneses y 14 sherpas nepalíes, a causa de una avalancha de nieve.
En otro de los grandes desastres de los ochomiles, en octubre de 2005, fallecieron sepultados por un alud de nieve 18 personas de una expedición integrada por alpinistas franceses y colaboradores nepalíes en el monte Kang Guru.

Asimismo, en abril de 1972, fallecieron 15 integrantes de una expedición coreana sepultados en la montaña de Manaslu, en el Himalaya nepalí.
La misma cifra de víctimas se produjo en mayo de 1996 a causa de una descomunal ventisca en la que unos alpinistas murieron en plena ascensión y otros fallecieron posteriormente a causa de las lesiones sufridas.

En uno de los aludes más graves de los últimos años, en septiembre de 2012 en Manaslu, se produjo la muerte de 11 montañeros, entre ellos ocho franceses y un español.

Los desastres de los últimos años han reabierto el debate sobre su posible relación con el incremento de expediciones comerciales a partir de los noventa.